Existen momentos donde dudamos sobre qué tan bueno somos en la cama, entonces ahí nos nace la pregunta de «¿Cómo sé si mi pareja tiene orgasmos?» «¿Será que los finge?» Pero no te preocupes, acá te ayudaremos a aclarar todas esas incertidumbres.
¿Qué es un orgasmo?
Lo primero que tenemos que tener claro es que el orgasmo pasa cuando alcanzas la excitación sexual. Produce la contracción de los órganos sexuales y la segregación de endorfinas provocando así una sensación de placer. En los hombres ocurre una descarga de semen, aunque es posible tener un orgasmo sin eyacular o viceversa, normalmente estos suceden juntos.
El clímax femenino puede ser consecutivo, debido a que algunas mujeres son multiorgásmicas, si se continúa con la estimulación ellas pueden sentir varias veces placer. En cambio, los hombres no pueden tener múltiples orgasmos, y necesitan un descanso de por medio para llegar a sentir otro, de no ser así se les hará imposible experimentar el clímax de nuevo.
¿Cómo sé si mi pareja tiene orgasmos?
Al alcanzar el placer sexual ocurren diversos cambios en nuestro cuerpo, los cuales pueden ser una evidencia clara de que tú pareja está satisfecha. Aunque la satisfacción masculina y femenina son distintas, tienen algunas señales físicas similares cuando suceden, como son:
- Una gran sensación de placer en tus partes íntimas, los muslos de ahí se contraen repetitivamente.
- La respiración y frecuencia cardíaca se aceleran.
- El glande y el clítoris se vuelven sensibles al contacto.
- Provoca alivio del estrés y el dolor.
- Por último, por la liberación de endorfinas te puedes llegar a sentir más feliz, relajado y con sueño.
Cambios en la mujer al alcanzar el orgasmo
Debido a que es mucho más fácil reconocer cuando un hombre está en el clímax. Vamos a enfocarnos en los cambios que ocurren en las mujeres con los que puedes identificar que ya ha tenido un orgasmo.
Pero si tienes alguna duda puedes reconocer que un hombre está satisfecho. Al sentir su respiración agitada, por los gemidos, aunque hay muchos hombres que se cohíben, y no gimen. Por último, lo más evidente es la eyaculación.
Ahora sí, puedes identificar que tú esposa o novia no está fingiendo los orgasmos, al fijarte si está lubricada, tiene hinchado, humedecido y enrojecidos sus labios. Además, ocurren muchos otros cambios como:
- El clítoris se erecta. Podrás observar mucho más grande.
- Se ensanchan y crece la vulva.
- Se le ve el rostro y el pecho más rosado.
- Ocurre un aumento de la presión cardíaca.
- Se vuelven más sensibles al dolor.
- Se endurecen sus pezones.
Consejos que te pueden servir
Existen varias sugerencias que puedes tomar en cuenta a la hora de tener relaciones sexuales. En tus encuentros íntimos debes priorizar los juegos previos. Los besos, las caricias, el estímulo juegan un papel importante para lograr el clímax.
También debes saber que las mujeres no llegan al orgasmo con la penetración, existen varios puntos que puedes tocar para que alcance el placer. Uno de estos es el clítoris, el cual puedes estimular de forma manual u oral. Otro es el punto G que se encuentra en la parte interna de la vagina, se puede tocar con los dedos. Puedes estimular estos dos puntos al mismo tiempo causando una mayor satisfacción en la mujer.