Aunque no lo creas, tener fantasías sexuales es totalmente normal y común. No tiene nada de malo ni particular, son pensamientos que quieres llevar a cabo o no, quizás te basta con tener para excitante. Ahora bien, ¿es importante contárselas a tu pareja? Eso depende de muchos factores.
Cada relación es un nuevo mundo de infinitas posibilidades y pautas establecidas. En este sentido, la comunicación es fundamental, pero cada quien decide hasta dónde llegar. Los límites los ponen ustedes. Aunque nada mejor que confiar plenamente en la pareja y abrirse completamente.
¡En lo absoluto! Es un error pensar que las fantasías sexuales representan insatisfacción en la pareja de alguna manera. Realmente son pensamientos eróticos excitantes que pueden llevarse a cabo o no, dependerá de la pareja. Quizás pocos lo crean, pero fantasear resulta muy saludable y, además, divertido. La idea de imaginar momentos sexuales solo o en compañía resultará sumamente placentera.
No debes sentirte mal si tienes fantasías sexuales. Incluso, si deseas cumplirlas, siéntete orgulloso y convérsalo con tu pareja, ¡que nada te dé pena! A pesar de que tú decides si te sientes cómodo con hablar libremente al respecto, la recomendación siempre será ser honesto y expresar los sentimientos o emociones para llegar a acuerdos saludables.
Las fantasías sexuales pueden abrir paso a nuevo mundo de experiencias en pareja para disfrutar mucho más de la sexualidad. De hecho, bastará con imaginar que cumplen la fantasía para excitarse en conjunto, eso será fascinante.
Pero ¡Ojo! Es importante decírtelo. Debes tener cuidado y evaluar las actitudes de tu compañero porque quizás no tenga la mente tan abierta y te culpe de algo que ni siquiera has hecho. Las fantasías eróticas son un tema divertido, sin embargo, requiere mucha responsabilidad y buena comunicación.
Si no está de acuerdo no puedes obligarlo. No hay más. Está claro que las fantasías no tienen nada que ver con deseo porque este último suele cumplirse, en cambio, la primera opción puede quedar solo en una idea. Por ello, es esencial que no intentes obligar a tu pareja para que esté de acuerdo contigo. ¡Cada quien tiene ideas diferentes!
Todavía existen personas con muchos tabúes en cuanto al sexo, y eso no está del todo mal. Solamente debes entender que no todos son como tú. Quizás de a poco pueden tener diálogos importantes donde cada uno exprese lo que sienta y piensa para llegar a acuerdos.
Al final, de eso también se trata la sexualidad, de conversar e ir comprendiendo qué es lo que le gusta a cada quien. Las relaciones eróticas pueden ser muy placenteras y excitantes cuando ambas partes están dispuestas a complacerse.
La recomendación es que no te afanes si tu compañero no está de acuerdo contigo porque quizás pueda llegar a estarlo con paciencia y mucho amor.
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